El frágil gobierno de coalición del país europeo afronta la presión de la OTAN y la Unión Europea para dedicar más fondos a seguridad y defensa
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España.
EUROPA PRESS MIAMI.- Uno tras otro, el Gobierno de Pedro Sánchez en España encara problemas, pero no cae. Esta vez se trata de un aumento al presupuesto de la defensa nacional, o ejército, al que se oponen sus socios políticos de izquierda.
Con una propuesta de incrementar el gasto militar hasta el 2% del PIB, o sea unos 31.000 millones de euros, o 34.000 millones de dólares, Sánchez enfrenta una nueva batalla, como si tuviera pocas.
El presidente del Gobierno español afirma que el país está preparado para acometer ese compromiso con la OTAN, pero evita aportar detalles sobre cuándo y cómo alcanzará ese nivel de inversión.
La agencia de noticias Europa Press reporta que Sánchez, durante una rueda de prensa en Finlandia, reiteró que España llegará a ese porcentaje en inversión militar, al día siguiente de una reunión con su socia de gobierno de coalición, la vicepresidenta segunda y dirigente de la agrupación Sumar, Yolanda Díaz, en la que no llegaron a una posición común sobre este asunto.
"Les aseguramos que estamos preparados para cumplir con nuestro compromiso y cumplir con ese objetivo del 2% del PIB, lo vamos a hacer", afirmó Sánchez.
A preguntas de los medios evitó concretar cuándo alcanzará el 2% del PIB para defensa, toda vez que se ha comprometido a acelerar las inversiones y llegar a ese porcentaje antes del año 2029, la fecha pactada inicialmente.
"Si me lo permite, les explicaré a mis ciudadanos en España, no aquí (en Finlandia), cómo y cuándo vamos a llegar a este objetivo", contestó el hábil político español.
Luego matizó que, para dar explicaciones, primero hay que definir las amenazas reales, las capacidades necesarias para afrontar esas amenazas y finalmente cómo se financian.
Para nadie es noticia que la llegada a la Casa Blanca del presidente Donald Trump y la retirada parcial de apoyo a Ucrania ha llevado a la OTAN y a la Unión Europea a aumentar la presión para que los países miembros dediquen más fondos a seguridad y defensa.
Sin embargo, el socio político Sumar rechazó el incremento de la inversión militar y con diversidad de posiciones entre los partidos que forman la coalición. Por ejemplo, Compromís, Chunta, IU y Comunes han proclamado su frontal rechazo a elevar el gasto militar, al entender que se incurre en una espiral belicista.
Ahora, tras el encuentro entre Sánchez y su socia política Díaz, el presidente del Gobierno español matiza el anuncio del aumento militar a realizarlo "lo antes posible" sin más concreción.
Por otra parte, el Partido Popular, que preside Alberto Núñez Feijóo desde la oposición, y cuyos votos Sánchez necesitaría ante la falta de apoyo de sus socios políticos, plantea que ha pedido un informe detallado para decidir su punto de vista, es decir el voto en el Congreso.
Descarga LA APP