KIEV.- Las fuerzas de seguridad de Ucrania detuvieron a un supuesto agente de la Inteligencia rusa que recavaba información sobre instalaciones militares en Leópolis y se encontraba planeando un atentado contra la red de ferrocarriles en la región de Rivne, en el noroeste del país.
El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) ha indicado en un comunicado que el presunto atacante trató de colocar un "artefacto explosivo" en las vías ferroviarias para que este explotara al paso de un tren de mercancía.
Asimismo, ha señalado que el plan tenía como objetivo "activar los explosivos de forma remota mientras el tren estuviera en marcha" para poder obstaculizar la cadena de suministro al Ejército en la línea de frente.
La detención se dio a medida que el sospechoso, un joven de 23 años procedente de Leópolis, colocaba los supuestos explosivos. Según fuentes policiales, el acusado recibía instrucciones desde Rusia.
La Inteligencia militar británica sospecha que Rusia está devolviendo al frente de combate de Ucrania a militares todavía heridos como parte de un esfuerzo de los comandantes rusos para no perder de vista a sus efectivos en el "sobrecargado" sistema médico del país.
"Resulta muy probable que el personal ruso esté regresando a sus tareas de combate en Ucrania con heridas sin curar, a menudo con muletas", según la última evaluación del Ministerio de Defensa de Reino Unido, publicada este domingo, y que cita como base "datos de inteligencia de fuentes abiertas".
"Existe una posibilidad realista de que los comandantes rusos estén ordenando estas actividades para retener al personal que de otro modo se perdería en el sobrecargado sistema médico", añade Londres, que apunta directamente a episodios así en el seno del 20.º Ejército de Armas Combinadas de Rusia, que estaría "formando grupos de asalto compuestos por heridos a los que ordena su entrada en combate".
FUENTE: EUROPA PRESS