MIAMI.- Ashley Moody, fiscal general de Florida, anunció haber obtenido una orden de arresto contra Ryan Routh, señalado como el presunto responsable de intentar asesinar al expresidente Donald J. Trump en West Palm Beach.
La fiscal general Ashley Moody investiga a Ryan Routh por delitos vinculados al fallido atentado contra el expresidente a pesar del FBI
MIAMI.- Ashley Moody, fiscal general de Florida, anunció haber obtenido una orden de arresto contra Ryan Routh, señalado como el presunto responsable de intentar asesinar al expresidente Donald J. Trump en West Palm Beach.
A pesar de las presuntas interferencias del FBI y el Departamento de Justicia, que habrían intentado frustrar la investigación estatal, las autoridades de Florida han identificado otros delitos cometidos por Routh el 15 de septiembre y sus alrededores.
Este miércoles, los fiscales estatales bajo la dirección de Moody solicitaron y obtuvieron una orden de arresto contra Routh por un cargo de intento de homicidio, conforme a la Sección 782.051 de los Estatutos de Florida. Según la fiscalía, el acusado habría cometido terrorismo doméstico, lo que resultó en heridas graves a una niña de seis años durante un accidente automovilístico ocurrido tras su huida. Este cargo conlleva una pena de hasta cadena perpetua.
“El 15 de septiembre, después de ser descubierto por miembros del Servicio Secreto en el campo de golf de Trump en West Palm Beach, Routh emprendió la huida hacia el norte por la Interestatal 95. Durante la persecución, agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de Martin intentaron detenerlo, lo que resultó en un accidente automovilístico que dejó a una niña gravemente herida”, detalló Moody.
La fiscal general expresó su pesar por el daño causado, “me duele el corazón por la niña y su familia. Mientras buscamos justicia para el presidente Trump, lucharemos con la misma fuerza para asegurarnos de que Routh pague por la tragedia que sus acciones provocaron en esta familia de Florida”.
El caso también ha generado tensión entre las autoridades estatales y federales. Según Moody, el FBI ha bloqueado repetidamente el acceso a pruebas relacionadas con el incidente, lo que llevó al estado de Florida a presentar una demanda federal contra el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, el pasado 23 de octubre.
“La situación cambiará el 20 de enero, y esperamos que se eliminen los obstáculos federales. El presunto frustrado homicida debe enfrentarse a todo el peso de la justicia, y la gente merece conocer la verdad sobre la historia, las motivaciones y el plan del acusado”, afirmó el gobernador Ron DeSantis.
Los fiscales estatales presentaron una declaración jurada de 18 páginas para sustentar la orden de arresto, en la que se detalla información obtenida por el equipo de la fiscal general sobre los eventos del 15 de septiembre.
“A pesar de los intentos del gobierno federal de frustrar nuestros esfuerzos, seguimos comprometidos con la transparencia y la rendición de cuentas”, destacó Moody en una rueda de prensa desde Tallahassee este miércoles 18 de diciembre.
Por su parte, el gobernador DeSantis que no puedo llegar a la rueda de prensa por el estado del tiempo, elogió la determinación de Moody y su equipo, “El gobierno federal ha bloqueado en todo momento la investigación de Florida sobre el intento de asesinato de Trump. Agradezco a la fiscal general y a su equipo por continuar a pesar de tanta resistencia”.
Mientras el FBI mantiene su postura de no colaborar plenamente, el estado de Florida avanza en su investigación y persigue justicia tanto para la víctima infantil como para el expresidente Trump. Moody reafirmó su compromiso de defender la autoridad estatal en los tribunales y buscar la verdad detrás del caso que ha captado la atención nacional.
El 13 de julio, durante un evento de campaña en Pensilvania, el entonces candidato presidencial republicano Donald Trump fue víctima de un atentado. Trump sufrió una herida leve en la oreja derecha y tuvo que ser evacuado del escenario por agentes del Servicio Secreto. El agresor fue abatido en el lugar por las fuerzas de seguridad.