domingo 15  de  diciembre 2024
CRISIS EN LA FRONTERA

Fraude inmigratorio crece ante el miedo a deportaciones masivas

Las mafias detrás del fraude migratorio explotan un mercado creado por una crisis de migración inédita y la proliferación de las redes sociales

Por Estefani Brito

MIAMI.- Los casos de fraude inmigratorio en Estados Unidos crecen ante la crisis sin precedentes creada por la administración demócrata de Joe Biden y Kamala Harris en la frontera sur, y del temor de los migrantes frente a las deportaciones masivas prometidas por el presidente electo, Donald Trump.

La política de fronteras abiertas impulsada por el Gobierno demócrata permitió el ingreso de cerca de 11 millones de inmigrantes indocumentados desde su llegada a la Casa Blanca, según cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), y, adeás, rebasó las cortes de inmigración con un atraso histórico de más de 3,7 casos pendientes de revisión para el inicio del año fiscal 2025.

El crecimiento de los fraudes migratorios en EEUU se ha potenciado en el auge de las redes sociales, con anuncios publicitarios engañosos sin ningún tipo de control, y un mercado inducido por una crisis inmigratoria inédita provocada por la administración saliente, señala la abogada María Herrera Mellado, especialista en inmigración.

"Empezó con la crisis migratoria porque hubo un mercado, hubo una demanda de millones de personas que, una vez que los dejaban entrar, quisieron capitalizar todo esto ofreciendo servicios fraudulentos", explica en conversación con DIARIO LAS AMÉRICAS.

El número de personas que ofrecen servicios migratorios sin ser abogados colegiados ni contar con las credenciales ha incrementado en los últimos años, alerta Herrera Mellado, incluso, con casos de inmigrantes recién llegados a suelo americano que anuncian asistencia para supuestamente ayudar a otros extranjeros a regularizar su estatus migratorio.

El fraude escala

Aunque los fraudes inmigratorios comenzaron con la administración Biden-Harris y la proliferación de las redes sociales, la abogada advierte que ha "rebasado" los límites con los anuncios de deportaciones del Gobierno de Trump cuando asuma la Casa Blanca el 20 de enero de 2025.

En el último mes, tras la abrumadora victoria del republicano en las recientes elecciones presidenciales, se abrió una nueva modalidad de fraude migratorio con personas que usurpan la identidad de abogados colegiados para estafar a los migrantes.

"Hay un doble tipo de fraude, el que se está dando por personas que ofrecen servicios migratorios sin los conocimientos y las licencias necesarias, que ponen a los inmigrantes en peligro, y lo que está pasando ahora, cruzando una línea roja más, al robarse los datos de los propios abogados de las bases públicas de los colegios de abogados para ofrecer servicios migratorios a través de Facebook Ads", señala.

El modus operandi de estas personas es acceder a las bases públicas de los colegios de abogados, copiar sus datos personales y números de licencia para crear cuentas falsas en redes sociales en las que ofrecen supuestos servicios de asistencia migratoria.

Con mensajes automatizados a través de WhatsApp, las mafias detrás de los fraudes migratorios se hacen pasar por abogados colegiados, cotizan el pago de la primera consulta y reciben los documentos de los migrantes para supuestamente comenzar a procesar los asilos, residencias y permisos de trabajo.

"Se hacen pasar por uno y prometen sacarle los papeles y la residencia antes de que Trump llegue a la Casa Blanca", indica. Para ello, ofrecen de manera engañosa darle los papeles en un lapso de seis meses, con la presunta garantía de evitar las afectaciones que puedan generar los cambios migratorios implementados por el presidente republicano si inician el proceso en diciembre.

"Estos delincuentes están ahora mismo aprovechando que Donald Trump anunció deportaciones masivas para decirle a los inmigrantes ‘ahora es el momento, si no los van a deportar’. Están aprovechando el miedo de estos anuncios del Gobierno", asevera.

Enfrentar un momento crítico

Ante la usurpación de su identidad, Herrera Mellado ha establecido contactos con el Colegio de Abogados de Florida y Texas, donde está colegiada, y ha puesto una denuncia en la Policía de Orlando. Además, espera retomar comunicación con la fiscal general de Florida, Ashley Moody, a quien transmitió en julio pasado, durante la Convención Nacional Republicana, su preocupación ante el aumento de los fraudes inmigratorios, de los que es víctima la comunidad hispana en EEUU.

"Se aproxima un momento crítico, en el que hay que ir detrás de estos delincuentes porque ya no solo le está afectando a los inmigrantes, tampoco es que le esté afectando solo al Gobierno, ya está afectando nuestra profesión. Podemos perder nuestra licencia porque no sabemos quién la está utilizando sin nuestro permiso", sostiene.

Aunque los colegios de abogados tienen una sección para investigar la práctica no autorizada del derecho, considera que es insuficiente ante el escaso personal y la falta de recursos para ir por las mafias detrás del fraude inmigratorio.

En este sentido, estima importante que la administración Trump cree una Oficina Federal de Lucha contra el Fraude Inmigratorio, que destine recursos para atacar al sistema que opera en este tipo de fraudes.

"Los fiscales estatales y federales tienen que tener una dotación presupuestaria para investigar este tipo de fraude de inmigración que a menudo se le imputa al inmigrante, cuando realmente hay mafias de personas que se hacen pasar por abogados, que no están capacitadas", apunta.

Además, considera que se debe limitar la posibilidad de que cualquier persona pueda rellenar formularios de consejo legal, principalmente en estados más liberales como California y Nueva York. "Los formularios de inmigración no son meros formularios. Uno tiene que dar datos personales, la información se hace bajo juramento de perjurio, la falsa información que puede llevar al inmigrante a la cárcel o a una deportación", menciona.

A los migrantes

También propone la redacción de una Orden Ejecutiva en la que se establezcan sanciones severas a individuos y organizaciones que cometan fraude inmigratorio, "con un enfoque en ‘notarios’ no autorizados y asistentes legales sin licencia", acompañado de campañas de concientización públicas y colaboración con las plataformas digitales para detectar y eliminar cuentas y anuncios fraudulentos.

"Esto es una oportunidad para el Partido Republicano de acabar con el fraude inmigratorio y poner un poquito de ley y orden en lo que es la representación legal", apunta.

Las mafias detrás de los fraudes migratorios, explica la abogada, presentan casos ilegítimos ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS), aprovechándose del desconocimiento de los inmigrantes, colapsando el sistema, valiéndose de identificaciones falsas, servicios legales incorrectos o inexistentes y engaños en redes sociales.

Ante esto, recomienda a los migrantes verificar las credenciales profesionales del abogado en el sitio web oficial del colegio de abogado del estado en el que se encuentre antes de realizar algún pago y denunciar actividades fraudulentas ante los colegios de abogados estatales o la Comisión Federal de Comercio (FTC).

"Simplemente porque hable su idioma y sea de su país no significa que esa persona esté capacitada. Busque oficinas de abogados, busque abogados con licencia y asegúrese que existen, llamen a su oficina e infórmense porque realmente el costo de una falsificación, de que alguien rellene su formulario en su nombre y mienta, aunque sea simplemente en una pregunta, es básicamente la prohibición de entrada si no de una década, de por vida al país", subraya.

@ebritop22

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