El oro alcanzó un récord rozando los 3.000 dólares la onza, como parte del plan económico estratégico del presidente Donald J. Trump y sus políticas arancelarias. Ahora habla de imponer aranceles a las bebidas alcohólicas europeas.
La onza del metal amarillo subió 1,24% hasta los 2.971,27 dólares, después de haber alcanzado un nuevo máximo histórico de más de 2.973 dólares, superando su récord de finales de febrero
El oro alcanzó un récord rozando los 3.000 dólares la onza, como parte del plan económico estratégico del presidente Donald J. Trump y sus políticas arancelarias. Ahora habla de imponer aranceles a las bebidas alcohólicas europeas.
El oro es parte del plan económico diseñado por renombrados economistas estadounidenses que ahora trabajan con el Presidente en levantar lo antes posible la economía estadounidense y consolidar a EEUU en su papel hegemónico mundial.
La onza del metal amarillo subió 1,24% hasta los 2.971,27 dólares, después de haber alcanzado un nuevo máximo histórico de más de 2.973 dólares, superando su récord de finales de febrero.
Como parte de su estrategia comercial liderada por Estados Unidos, Trump le dijo a Francia y a la Unión Europea que pondrá aranceles del 200% sobre sus champañas, vinos y otras bebidas alcohólicas, si la Unión Europea no retira sus próximos aranceles del 50% sobre el whisky estadounidense.
Como consecuencia "el precio del oro aumenta mientras las discusiones sobre los aranceles reducen el apetito por el riesgo" y empujan a los inversores "hacia el metal precioso considerado un valor refugio", explicó Ricardo Evangelista, analista de ActivTrades, en declaraciones a la AFP.
Y esto es precisamente lo que busca Trump.
El mandatario estadounidense quiere que los bancos centrales compren y los inversores compren oro y muevan las reservas de dólares estancadas a nivel mundial. Ese acaparamiento en las reservas de dólares ha traído como una de las consecuencias el declive de la actividad manufacturera estadounidense, entre otros efectos negativos.
Mientras, la Unión Europea (UE), China y Canadá anunciaron medidas de represalia en respuesta a los aranceles del 25% sobre el acero y el aluminio impuestos por Washington, que entraron en vigor el miércoles.
El oro también se beneficia de un contexto geopolítico incierto, aparentemente.
El Kremlin criticó el jueves la idea de un alto el fuego de 30 días en Ucrania, argumentando que solo serviría como "un respiro" para el ejército ucraniano, que enfrenta dificultades en el frente, justo cuando una delegación estadounidense tiene previsto presentar en Moscú el plan impulsado por Trump.
Otro de los asuntos centrales es que el mundo fije su mirada en Ucrania, mientras la Casa Blanca ejecuta acciones estratégicas importantes en su primera etapa del ambicioso programa económico y geopolítico dentro y fuera de EEUU.
Washington ha despertado el apetito por la compra de oro, de ahí la auditoría que Trump pidió a Fort Knox, donde se encuentra gran parte de la reserva de oro de EEUU. Se espera que el precio del metal continue subiendo en las próximas semanas y meses para sobrepasar la barrera de los 3.000 dólares la onza.
FUENTE: Con información de AFP.