MIAMI- La congresista por Florida, María Elvira Salazar, acusó a la petrolera Chevron de ser cómplice del régimen de Nicolás Maduro, al señalar que "sus operaciones en Venezuela están alimentando una dictadura que se mantiene gracias al sufrimiento y la falta de libertad del pueblo venezolano".
Según Salazar, Chevron pagó 300 millones de dólares en impuestos al régimen el año pasado por la venta de petróleo, lo que constituye, en sus palabras, un acto “despreciable y monstruoso” que traiciona los valores democráticos del continente.
La congresista calificó las acciones de Chevron como “una vergüenza” y sostuvo que la compañía debe asumir su responsabilidad por financiar al régimen de Maduro.
"Cancelar operaciones en Venezuela"
Salazar hizo un llamado a la administración del presidente Donald Trump para que cancele las licencias de operación de Chevron en Venezuela, asegurando que tal medida es necesaria para detener la complicidad empresarial en la perpetuación de la dictadura.
“En Venezuela, Chevron no solamente está permitiendo la opresión, sino que también se está beneficiando económicamente de ella”, afirmó la congresista, subrayando la gravedad de estas acciones.
Estas declaraciones se suman a las críticas hacia empresas que, a pesar de las sanciones internacionales, continúan operando en Venezuela, facilitando el flujo de recursos que fortalecen al régimen y perpetúan las violaciones de derechos humanos en el país caribeño.
FUENTE: REDACCIÓN DLA